Venezuela se ha convertido en un laberinto sin salida donde el común
denominador es la falta de oportunidades y la fuga de talentos, escenario que
no es desconocido ni siquiera para figuras destacadas y con amplio recorrido en
las historia del país como Elba Escobar.
El próximo año, la reconocida actriz cumplirá 40 años de carrera y tendrá que hacerlo en un vaivén que la mantiene entre Miami y Venezuela desde hace poco más de un año, en búsqueda por supuesto de oportunidades.
“Una de las cosas más importantes es la seguridad personal. La otra más
importante es la calidad de vida y la otra también importante es que aquí no
hay posibilidad de progresar profesionalmente. Llega un momento en que ya a uno
no le queda más que hacer lo mismo de siempre.”, cuenta Escobar sobre lo que la
impulsó a emigrar.
“Hay cosas con las que uno puede bregar, echarle pichón, trabajar, luchar para
que mejore la calidad de vida, los servicios, el acceso a los alimentos
básicos. Pero la inseguridad es una situación que te hace vivir aterrado. Que
en cualquier momento a cualquiera le provoque hacerte daño o a tu familia, son
palabras mayores. La gente está secuestrada dentro de sus casas”, expresó sobre
la terrible calidad de vida de los venezolanos.
Por último, Escobar expresó que mantiene la esperanza de que los
venezolanos “Recuperemos nuestros valores, con los que crecimos de hermandad,
solidaridad, amor, compasión, misericordia, alegría, bondad, igualdad. Que no
nos dejemos tentar por la oscuridad, que nos quedemos en el lado luminoso
apoyando desde lo mejor de nosotros mismos. No nos dejemos tentar por la rabia
y por el odio porque desde ese lado no vamos a poder apoyar”.


